lunes, 16 de abril de 2012

Lunes: un buen día para comenzar

Lunes. Para la mayoría de nosotros, un día complicado... 

¿Y si intentáramos cambiarlo? Os propongo un reto; es algo de lo que ya he hablado aquí en otras ocasiones, pero hoy, primer día de la semana, con un montón de días y trabajo por delante, tal vez estaría bien comenzar con ello.

¡Allá va! Sé que muchas personas, entre las que me incluyo, ya lo estamos haciendo, y que otras, con o sin razón y siendo ese pensamiento totalmente respetable, se muestran bastante escépticas a llevarlo a cabo. Para las primeras, será sólo un recuerdo; para las segundas, sólo deciros que no perdéis nada, así que, ¿por qué no intentarlo?

Veréis, es tan simple, o tan complicado, como comenzar a modificar nuestro lenguaje. Y no me refiero sólo a eliminar el "no", sino a mucho más. Está más que comprobado que todas las formulaciones negativas que recibe nuestro cerebro nos hacen entrar en un bajo estado de ánimo, disminuyen nuestra autoestima y, en ocasiones, hacen que no veamos realmente cómo somos; por el contrario, si transformamos esas formulaciones en positivas, descubriremos que nos encontramos mucho mejor, con más fuerza y vitalidad, con energía y con la idea de que, realmente, podemos conseguir lo que nos proponemos.  

Tampoco es una tarea que se pueda llevar a cabo de la noche a la mañana; primero, deberíamos pensar en cuáles son esas frases o palabras negativas que nos repetimos constantemente a nosotros mismos. Pueden venir motivadas por un fracaso pasado o, simplemente, porque se las hemos oído decir a otros (ufff, cuánto influyen los demás...) y son totalmente personales. No estaría de más hacer una lista con ellas y, ya de paso, mirar cómo nos sentimos cuando las escribimos o decimos... ¿te sientes bien? Seguro que no, así que, ¡allá vamos! A continuación, simplemente, escribe lo mismo de manera más positiva y vuelve a pensar en cómo te sientes; ¿cambia algo? Si la respuesta es afirmativa, ¿no crees que merece la pena comenzar a modificarlo? (vuelvo a repetir que, si no ha sucedido nada, sólo habrás perdido unos minutos de tu tiempo, así que tampoco tiene demasiada importancia...)

Como tal vez alguno está pensando que no tiene demasiado claro cómo hacerlo, aquí os dejo una serie de ejemplos. Podéis completar la lista con los vuestros propios, modificarla, planificarla para cambiar un par de frases al día, a la semana... y veréis cómo todo se ve de otra manera.

Formulaciones negativas                           Formulaciones positivas

Rechazar                                                   Malentender
Exigir demasiado                                         Estar muy ocupado
Tonto                                                       Queda mucho por aprender
Deprimido                                                 No totalmente feliz
Preocupado                                               Interesado
...

¡Incluso podríamos reformular las positivas y convertirlas en algo todavía mejor! ¿Por qué no, "lo mejor" en lugar de "muy bueno"? o ¿"cargado de energía" en vez de "activo"...?


Ahí os lo dejo. Os invito a que lo probéis, os queráis y disfrutéis de vosotros mismos y de las miles de capacidades que poseéis en vuestro interior.



No hay comentarios:

Publicar un comentario